26 de diciembre de 2012

Demasiado

Lo único que se oye es mi propia respiración, a la que estoy tan acostumbrado que podría obviarla. Silencio. En esta casa no hay un sólo reloj analógico. No se escucha pasar el tiempo. Lo echo de menos. Echo de menos demasiadas cosas. Pero, sobre todo, la echo de menos a ella. Demasiado.

Todo fue demasiado rápido. Coincidíamos en demasiadas cosas. Se metió demasiado en mi cabeza. La entendía demasiado. Me entendía demasiado. Demasiado complicidad para el tiempo en que nos tocó jugar. Demasiada precipitación. ¿Por mi parte? ¿Por la de ambos? No importa. No es demasiado importante. Ella si lo era. ¿Lo es? Lo es. Es demasiado...

Demasiado buena para ser verdad.

Me está costando demasiado levantarme esta vez. De hecho, no me estoy levantando. No puedo. Estoy demasiado cansado. Demasiado dolorido. Demasiado roto. Supongo que no quiero recuperarme de esto aún, pues estoy dispuesto a esperarla. O simplemente, a olvidarla. Quizás me cueste demasiado tiempo. Ella se convirtió en mi reloj y ahora vuelvo a vivir sin horarios. O estoy en la hora de no vivir.

Demasiadas vueltas a algo que no tiene solución.

Demasiados "demasiado".

Y lo único real, es que todo es insuficiente ahora mismo para hacerme feliz, pues me falta ella.

28 de mayo de 2012

"I'm too old for this shit"

Frustración. Miras tu vida y nada es remotamente cercano a como pensaste que sería a estas alturas de la película. Eres ese hijo decepcionante que tus padres detestan. Eres ese amigo que falla en el peor momento. Eres ese brillo falso de lo que parecía ser talento y no es más que un desperdicio, basura. Eres el reflejo horrendo y deforme que devuelve cada espejo. Eres... no, no eres esa persona que ella desea tener cada noche en su cama.

Ira. Te enfadas contigo mismo y un odio visceral empieza a apoderarse de ti. ¿Qué coño estoy haciendo con mi vida? ¿Dónde quedaron todas aquellas ilusiones? O mejor dicho, ¿cuándo bajé los brazos y dejé de luchar por todo ello? Aunque... ¿Alguna vez realmente peleé por ganar esta batalla?

Furioso te prometes a ti mismo que todo esto va a cambiar. De la rabia empieza a brotar un ansia de superación personal, de crecer, de revertir toda esta situación. De empezar a avanzar por mucho que la vida golpee. Motivación. Todo es posible. Querer es poder. La felicidad está a la vuelta de la esquina.
Y te vas a dormir pronto, porque mañana vas a madrugar que tienes que ponerte manos a la obra.
Mañana es el primer día del resto de tu vida.

La noche transcurre plácida. Descansas. Nada perturba tu sueño.

Llega la mañana. El despertador acude puntual a la cita que concertaste anoche. Todo debería ir bien. Pero no es así. La promesa que te hiciste hace unas horas se ha desvanecido. El aire de repente se ha vuelto más denso y te asfixia. Sientes como la gravedad se ha duplicado y apenas tienes fuerzas para levantarte. A duras penas te incorporas en la cama y una sensación de mareo te invade. Nauseas. Consigues sentarte en el borde de la cama. El suelo está frío y el Sol te da una bofetada reactivando tus pupilas. Levantas la cabeza y le ves de nuevo ahí en el espejo. La perfecta imagen de un perdedor. Y en ese momento, es cuando definitivamente, todas esas ilusiones y ganas que acumulaste anoche, desaparecen y vuelves a ser insuficiente para el mundo. Y entonces, al igual que Danny Glover en "Arma letal", te dices a ti mismo:

-Estoy demasiado viejo para esta mierda.

Y así trascurren, uno tras otro, todos los días de mi vida...

http://www.youtube.com/watch?v=eAAw05J-6ek

Consejo del día: Para ser realmente tipos duros, debéis ver todas las películas de acción de los 80 y 90.

15 de marzo de 2012

Sentir

Había tocado fondo. Cuando lo único que no me iba mal se rompió, dejé de sentir.

Frío.

Es lo único que sentía. Nada más. Sin dolor, sin taquicardias, sin miedos, sin nada que perder...

Excepto tú. Eras lo único que me unía al mundo. Lo único que cambiaba mi ritmo cardíaco.

Y has vuelto a hacerlo. Me has devuelto a la vida. Tras muchos días he vuelto a sentir algo.

Dolor.

5 de marzo de 2012

Instante

Nunca serás más bonita que aquella mañana, en la que yacías en mi cama, desarropada, sin las sábanas que por la noche fueron nuestro abrigo cubriendo tu preciosa figura, como el regalo más hermoso que jamás pude recibir.

Ese momento en que mis ojos paseaban por cada milímetro de piel que mi lengua ansiaba recorrer. En que mis labios deseaban volver a probar el tacto y el sabor de los tuyos. En ese, en que mis manos temerosas, dubitativas, impacientes, cálidas, anhelaban acariciarte.

Nunca serás más bonita que en aquél segundo en el que por primera vez, hiciste que no sintiese dolor. En el que por primera y única vez, fui totalmente feliz.

Nunca serás más bonita que en instante que fuiste mi corazón.

Egoístas

La gente suele usar la palabra "egoísta" como algo despectivo. Algo negativo. Yo no lo veo así. Parto de la siguiente premisa: El ser humano es egoísta por naturaleza.

Lo más lógico es que cada uno busquemos prioritariamente nuestra satisfacción y bienestar propio, que hagamos las cosas que nos hacen sentirnos bien. Total, lo único que tenemos en esta vida somos nosotros mismos. Y el que lo niegue, es un iluso.

Lo que es criticable es lo que hacemos por egoísmo. Cuando hacemos algo que traiciona nuestros principios, cuando perjudicamos a otro, cuando actuamos injustamente para conseguir algo, eso es un egoísmo negativo. El que debería estar mal visto.
Conseguir lo que mereces, cuando actuamos desinteresadamente a favor de otros, cuando aprovechamos una oportunidad, eso es egoísmo positivo, que es necesario. El amor, es la forma más bonita de egoísmo positivo, cuando la felicidad de la persona amada supone la razón más importante de tu bienestar y cuidar que se mantenga es tu objetivo principal.

A si que chicos, sed egoístas, pero al menos, sedlo por una buena razón.

Consejo del día: Cada noche, cambiad las cosas de sitio en vuestra casa. Cada mañana, vuestros padres se volverán locos pensando dónde están las cosas; hasta que llegue el día, que realmente acaben enfermos de la cabeza, haya que encerrarlos y os quedaréis con la casa para vosotros solos.